Reseña: Ángel Albisu
Creo que todos aquellos los cuales tuvimos algo de Química en el secundario sabemos que con dos de Hidrogeno (H) y uno de Oxigeno (O) podemos crear la formula del agua (H2O). Pero tal vez no todos sepan que dos científicos, cerebritos en sus profesiones universitarias, fueron capaces de mezclar más que dos elementos de la tabla periódica para crear personajes únicos e insuperables para los cómics: una diosa mitológica y un viajero de la eternidad.
El primero (cronológicamente hablando) fue William Moulton Marston que era un psicólogo, inventor del primer Detector de Mentiras y desarrollador del modelo teórico DISC (Dominio, Influencia, Sumisión y Conformidad a las normas) con el cual buscaba medir la "energía mental", es decir "entender y describir el comportamiento humano normal".
El otro es Héctor German Oesterheld quien antes de ser guionista de historietas fue un geólogo que trabajo para YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales). Quien una vez terminados sus estudios como geólogo se dedico como aficionado a la ciencia y a los avances tecnológicos de su época. Así como también a los programas espaciales de la NASA. Publicando en más de una ocasión artículos referidos al tema para revistas de divulgación científica como Más Allá o Génesis. Ambas editadas por el mismo HGO.
Un dato curioso en la obra de ambos autores es que luego de ejercer sus profesiones universitarias, uno como psicólogo y otro de geólogo, se dedicaron por tiempo completo a eso que llamaban cariñosamente como su hobby. En la que demostraron su potencial creativo como escritores de historias capaces de entrelazar temáticas científicas con elementos fantásticos.
En el caso de Marston, luego de haber trabajado como Profesor de Psicología en la Universidad de Radcliffe, decidió aventurarse como guionista de historietas en 1941 en la All American Publications. Y es en ese nuevo lugar como guionista que no solo encontró la forma de seguir divulgando su modelo teórico DISC, en las paginas de la Mujer Maravilla; sino también dar a conocer su visión de que las mujeres poseían una noción sobre la paz basada en el "encantamiento amoroso" lo cual llevaba a un estado ideal de sumisión por parte de los hombres. En palabras del mismo Charles Moulton, seudónimo con el que escribía los guiones, "El remedio obvio es crear un personaje femenino con toda la fuerza de Superman mas todo el encanto de una mujer bella y buena".
Con Oesterheld la cosa fue mas por el lado de la ciencia ficción y su argumento propio de lo que debería ser un héroe. Siendo así que con El Eternauta busco plasmar esa idea que tanto le fascinó leer de chico en Robinson Crusoe: ¿Que pasaría si un pequeño grupo de personas debe sobrevivir al ambiente hostil que se encuentre fuera de su refugio? Anexándola después con su concepción de aventura en la que un hombre común se debe enfrentar a un hecho extraordinario y optar por hacerle frente topándose así con la aventura. Pero aquella idea mutaría junto con su personaje en la segunda versión de la historia (hecha con Alberto Breccia en 1969) y en El Eternauta II. Donde Juan Salvo apostaba mas por la causa que se estaba defendiendo que en el bienestar del grupo.
Caracterizados los personajes mas reconocidos de ambos pareciera verse a simple vista el porque de su popularidad. Y es que en ambos casos podemos ver que están ligados inseparablemente a la manera de pensar de sus creadores.
En la Mujer Maravilla pueden verse elementos reales convertidos en ficción sin que pudiésemos darnos cuenta, porque después de todo, Marston no solo creo el Detector de mentiras sino también el Lazo de la verdad. Además de que con su aparición en los cómics pudo revalorizar el lugar de la mujer en la sociedad. Algo que Marston hacia desde hace tiempo con su militancia en los movimientos feministas de la época.
A todo eso. En la cabeza de HGO se diría que las cosas iban cambiando según como transcurrían en el ambiente que lo rodeaba. Algo comprobable en las conductas que fue adoptando Juan Salvo entre una historia y la otra. Así como también con las de su guionista. Porque el Oesterheld de 1957 no era el mismo que el de 1973. Ya que por esos años militaría en las filas de la agrupación Montoneros, manteniendo dos tipos de guiones, el de aventuras que enviaba para Columba y el cargado ideológicamente para el diario Noticias o la revista Evita Montonera.
Lo increíble en la vida de Marston y Oesterheld (que es la idea de la reseña) esta en el como parecieran haber ido en contra de lo que regía por entonces en la sociedad de su tiempo. Tan solo me queda recomendarles una película y una serie para que sepan más acerca de estos guionistas y científicos locos (aunque uno era psicólogo).
La película se llama El Profesor Marston y la Mujer Maravilla (2017) y en ella puede ahondarse aun más en la vida privada del creador del personaje femenino más poderoso de DC cómics. Pero en serio, en la película podemos ver através de los ojos de la directora y guionista de la película (Angela Robinson) como habría sido la relación poli amorosa de Marston con su mujer y su amante.
German, Últimas Viñetas (2013) fue una miniserie de 12 episodios que se transmitió por la TV Publica. Ambientada en los últimos años de HGO como guionista de historietas, trabajando en una editorial de tintes conservadores, donde podemos ver la forma en que se hacían las historietas en aquel clima previo al Golpe de Estado de 1976.
Y ahora si, vayan y cuenten por ahí que la Mujer Maravilla no creo el Lazo de la Verdad, que los científicos pueden ser guionistas de historietas y que hay una película donde un tipo sale con tres mujeres a la vez.
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